sábado, 18 de febrero de 2012

Más vale prevenir, que lamentar.

Por Armando Brugés Dávila.

El título de esta nota, fue un proverbio muy usado, ante situaciones no claras de peligro y precisamente por estos días tres artículos han llamado mi atención por la misma razón. Precisamente por tratar del mismo peligro, el peligro que puede generar la adquisición de grandes extensiones de tierras por entes extranjeros.
El primero publicado en abril de 2004, por la palestina Kawther Salam.  En él se  hace una denuncia pública sobre un problema que según ella se venía presentando en la Patagonia chilena. Se refería a una exploración taimada que se estaba realizando sobre dicho territorio, bajo una muy sospechosa fachada de turismo, señalando que la misma se llevaba a cabo por soldados israelitas desde 1.976 y que se intensificó a partir de 1.982. Comentaba que en un viaje turístico realizado por ella en la zona, se sorprendió por el hecho que allí encontró a muchos de sus viejos conocidos de Hebrón, refiriéndose a los soldados del IDF (Fuerzas de defensa de Israel, que tomaron Palestina), los que prácticamente se comportaban como dueños de la zona. Lo segundo que le llamó la atención fue que tanto en Chile como en Argentina, grandes extensiones de tierra estaban siendo compradas por extranjeros, y mencionaba, de manera especial, a un tal Douglas Tompkins, conservacionista que compró 330.000 hectáreas, al norte de Chaitén, y quien también poseía tierras en otras localidades Chilenas y argantinas a través de su Conservation Land Trust.
Luego, el 26 de enero de 2012, aparece el segundo artículo titulado “La extranjerización terrateniente”, su autor es Guillermo Maya Muñoz. Allí señala que la necesidad de producción de los llamados biocombustibles, ha generado unas ansias anormales de comprar o alquilar tierras por parte de inversionistas extranjeros, no sólo en África sino también en Suramérica, lo que según él, se ha convertido en factor de despojo de las tierras a las comunidades campesinas de estos continentes. Colombia obviamente no es la excepción. Señala que Empresas como la Cargill, la Monica Semillas y la Merhav, se encuentran haciendo millonarias inversiones en compras de tierra. La Merhav, por ejemplo, propiedad de un grupo inversionista israelíes, tiene en Pivijay -Magdalena- un proyecto de 300 millones de dólares en compra de tierra para producir etanol a partir de la caña. Igualmente, señala que empresas extrajeras se están apoderando de las tierras del macizo colombiano, con el fin de privatizar las fuentes de agua.
Y ahora, el tercer artículo lo produce la Unidad Investigativa de El Tiempo, el 5 de Febrero del año en curso y habla de cuatro ex militares israelíes que se han convertido en los nuevos “amos” de Taganga (Corregimiento de Santa Marta). La situación ha llegado a tal punto que el Alcalde ha tenido que solicitar ayuda al ejército y al gobierno nacional. A los primeros, para patrullar el balneario y  a los segundos, para que revisen las compras no muy claras que de terrenos han realizado allí extranjeros. Es más, la primera autoridad del Distrito se propone solicitar a la embajada de Israel y a la Cancillería colombiana, para que los acompañen en la revisión de la situación jurídica de los ex militares asentados en el balneario.
Según El Tiempo algunos de los ex militares señalados viven en una mole de concreto vigiladas por ocho cámaras de seguridad. Otros portan armas con salvoconductos y se mueven en camionetas 4x4 con la bandera de Israel. No abordo el problema de la droga y de la prostitución que allí campea, de la cual también se acusa a estos personajes, para no extenderme demasiado.
Los tres artículos tienen coincidencias graves sobre adquisición de terrenos nacionales por extranjeros y eso hace que la situación se torne delicada porque, entre otras cosas, como dice el articulista del Blog Despierten, “Israel es el único país cuya constitución no se basa en fronteras geográficas como el resto de naciones del mundo: el pueblo de Israel está delimitado por raza y religión, es decir donde compra tierras un judío de raza y que profese la religión judía, ese territorio, es Israel”. Es mejor que comencemos a prevenir antes que sea demasiado tarde y después lo tengamos que lamentar por siempre.
http://inquietudesajbd.blogspot.com/

4 comentarios:

  1. La situación de Taganga no debe extrañarnos pues siempre la hemos mirado con desdén, recordemos nada mas el famoso "Boquerón" un canal de concreto que arrojaba la basura de Santa Marta al mar de Taganga, y no obstante siendo una vitrina turística de la Santa Marta mágica que se vende promocionalmente con fotos que nos sabemos de memoria. Nunca hemos mirado con ojos de ntegración a una comunidad que debe defenderse sola y subsistir con lo que llegue; y estamos seguros lo seguirán haciendo.

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    1. Excelente análisis!
      Si se desatiende algún sector de la ciudad, cualquier coasa puede pasar, esto es aplicable a cualquier lugar del mundo.
      Por esta razón muchos paises europeos, No permiten a EXTRANJEROS comprar tierras..y si lo hacen ..los investigan y analizan, nada se hace sin previo estudio...
      (Es mejor tener 100 enemigos afuera..q 1 adentro).
      cordial saludo.
      Marijó

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  2. Vemos en tu artículo, Armando, que en los 3 casos están involucrados Israelitas. De mucho cuidado y peligroso para nuestra soberanía me parece esto. Con relación a Taganga, ellos los Tagangueros y nosotros los samarios,somos quienes estamos obligados a manifestarnos y tratar de evitar este despojo y colonización, porque de parte del Gobierno de Chucky, el cual ha manifestado como cipayo yanqui que es, sus debilidades ante el gobierno Israelí, no esperemos nada en favor de nuestra soberanía.

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  3. Armando, excelente tu trabajo periodístico y tu análisis de la situación de riesgo que se vive en Taganga, corregimiento tradicional de nuestra ciudad ahora convertida en Distrito. Las cosas no pueden quedar allí en una investigación de rutina, esto obliga a la elaboración, sustentación y presentación de una Ley en el Congreso por parte de nuestros H. Representantes que reglamente (Con prohibición absoluta a extranjeros) la compra de tierras en el país, especialmente en nuestro caso teniendo en cuenta que los Cerros en el caso de Santa Marta y el uso del suelo son de propiedad del Estado. Hay que hacer una campaña solida en este sentido. Gracias por enviarme tus valiosas notas, un abrazo Caribe CarlosCalvanoHernandez

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