viernes, 28 de diciembre de 2012

La ola de problemas en USA sigue creciendo.

          Por Armando Brugés Dávila.

 Resulta que en los Estados Unidos, entre los años 1861 y 1865, se dio la Guerra de Secesión o Guerra Civil, en la cual se enfrentaron las fuerzas de los estados del Norte contra la de los Confederados del Sur. Las primeras, llamadas de la Unión o Republicanas, lideradas por Abraham Lincoln dispuestas a imponer el llamado Sistema Americano, el cual incluía una política aduanera proteccionista, inversiones públicas en infraestructura y una política bancaria inflacionista, para lo cual necesitaban un país unificado, y las segundas, lideradas por el demócrata Stephen A. Douglas, a quienes no convenía la propuesta de la Unión, dado su carácter agrario y esclavista, razón por la cual insistían en la secesión, no obstante desear la continuación  de las relaciones entre el Norte y el Sur. Los estados que encabezaron esta rebelión fueron: Florida, Alabama, Georgia, Luisiana, Texas, Tennessee, Carolina del Norte, Carolina del Sur y Misisipi.

Hoy día, 151 años después, se presenta una situación aunque similar no igual, debido a que al presidente Obama y a sus asesores en su afán de ganar la reelección, se les ocurrió abrir en el sitio de internet de la Casa Blanca, un apartado denominado “Nosotros el Pueblo”. Allí la administración invitó a los ciudadanos estadounidenses a proponer cambios, cualquiera que fuesen, pero que a ellos les gustara ver en práctica en la política del país, pero con una condición: las propuestas deberían alcanzar dentro de los 30 primeros días de montadas en Internet un mínimo de 25.000  firmas para que la Casa Blanca estuviese obligada a  responderlas o hacer comentarios al respecto. Y sucedió lo inesperado: grupos de ciudadanos de una serie de estados, entre los que se destacan Texas, Georgia, Tennessee, Luisiana, Carolina del Sur y del Norte, Virginia, Misisipi y Arkansas, fundamentados en aspectos económicos, fiscales y aún sociales resultaron pidiendo la separación de Estados Unidos. Algunos expertos consideran que se trata de una acción con más sentido populista y electorero que otra cosa; en su criterio siempre han existido al interior del país, grupos conservadores manejando aún las ideas de los Confederados del Sur del siglo XIX. En USA también parece tener vigencia aquello de “No se puede dar papaya”, y eso fue lo que hizo el Nobel de Obama. Vale anotar que se trata casi exactamente de los mismos estados que en el siglo XIX lideraron el movimiento separatista de los demócratas esclavistas del sur. Bien se podría decir que se trata de una fiel copia de su original pero al revés. Ahora es la ultraderecha del sur la que propone la separación para complicarles las elecciones a los demócratas. No obstante, varios estados parecen haber alcanzado las 25.000 firmas, entre ellos, Texas, Georgia, Tennessee, Luisiana, Carolina del Sur, y Arkansas.

El caso más interesante es el de Texas que parece haber alcanzado las 100.000 firmas, quienes argumentan para separarse “que los Estados Unidos continúan sufriendo dificultades económicas, cuya raíz está en la negligencia del gobierno federal (léase demócrata) de reformar los gastos internos y externos. Los ciudadanos sufren descarados abusos a sus derechos. Y dado que el estado de Texas es la decimoquinta economía del mundo y mantiene un presupuesto equilibrado, es factible abandonar la unión y proteger el nivel de vida de sus ciudadanos, así como sus derechos y libertades en correspondencia con el ideal de nuestros padres fundadores, los cuales ya no están siendo reflejadas por el gobierno federal”. Por otro lado, un grupo ha mandado otra solicitud en el sentido que toda persona que firme una petición en ese sentido se le prive de la ciudadanía y se le deporte “pacíficamente” del país. Lo cierto del caso es que Obama está en la obligación de contestar porque a eso se comprometió públicamente, en caso de que las peticiones alcanzaran más de 25.000 firmas. Amanecerá y veremos.

 

 

domingo, 16 de diciembre de 2012

La estructura de la corrupción.


Por Armando Brugés Dávila.

Razón tiene la Directora Ejecutiva de Transparencia por Colombia al mostrarse preocupada por los resultados del  IPC (Índice de Percepción de Corrupción), según los cuales nuestro país solo alcanza 36 sobre 100 puntos posibles. No obstante tener razón en su preocupación, desconcierta cuando manifiesta que no entiende cómo a pesar de haberse producido en el país reformas institucionales para combatir la corrupción, ésta se mantiene como si nada. Es más, según ella, se percibe que la impunidad campea. Lo paradójico resulta en que a continuación manifiesta que la corrupción ha alcanzado un carácter estructural en el país y aquí radica su gran equivocación.  

Si entendemos como estructura las relaciones sociales primarias que sirven de fundamento a la organización interna de los grupos sociales, tenemos que hablar de una corrupción que viene implementándose desde la Colonia. Si algo caracteriza a los sistemas de explotación colonialistas, es precisamente el manejo de una política en donde mediante el soborno y el nepotismo manosean a los sectores influyentes de la sociedad colonizada para beneficio de la metrópoli. Estos fueron los cimientos de nuestra actual estructura social. Entonces no es que la corrupción en nuestro país haya alcanzado un carácter estructural, lo que sucede es que nuestra relaciones sociales han tenido como fundamento estructural la corrupción  misma. Nacimos amamantándonos de ella. Lo que ahora acontece es la consecuencia de un desarrollo tal de la misma que ha llegado hasta el aniquilamiento de la vergüenza, la que al igual que la esperanza son de las últimas fundamentaciones biológico-sociales que perdemos los seres humanos. Tiene mucha razón la Directora de Transparencia por Colombia cuando dice que el problema viene escalando de tiempo atrás, sosteniendo además que la misma no tiene color político; claro, porque el símbolo de la corrupción a nivel planetario es el signo $, el color político solo sirve como engañabobos. Igualmente de manera “ingenua”, como si viviera en otro planeta, manifiesta que el ejecutivo, al igual que el legislativo, la rama judicial y los órganos de control, deben coordinarse si se quieren alcanzar resultados efectivos, parece olvidarse que en este país  hasta la sal tiene posibilidades de corromperse.

El Procurador, por ejemplo, cuya reelección ha sido tan criticada por anti-ética, no tuvo inconveniente en manifestar en un foro sobre corrupción en el Congreso de la República, que el país sufría un “drama” por culpa de la corrupción. Mejor dicho él estaba escandalizado. Más descaro imposible. Y cómo queriendo congraciarse con el sector público en donde de alguna manera es cacique, la enfiló contra el grupo que más había señalado de corrupto a dicho sector, los ejecutivos de empresas, diciendo que los colombianos teníamos que  quitarnos la idea errada de reducir el tema de la corrupción exclusivamente a lo público, tomando como ejemplo a Interbolsa, a la que calificó como una típica pirámide de estrato seis, llamando además la atención  de que cada vez más la nación estaba abocada a esta clase de escándalos en el sector privado. Algo así como una versión moderna del “entre bomberos no nos pisemos las mangueras”.

La nación debe tener claro que los cambios que requiere este país son estructurales, los cuales  infortunadamente no se producen de un día para otro y que para iniciar el proceso se debe comenzar, si en realidad queremos cambiar, por el sistema educativo. Esto lo dijo el Comité de  Sabios hace quince años. Lo demás no es sino pura y física paja.



domingo, 9 de diciembre de 2012

Latinoamérica traza pautas en política social.

Por Armando Brugés Dávila.

Sorpresivamente, Ecuador ha asumido el liderazgo de la legislación social en el planeta y lo digo porque su Asamblea Nacional acaba de adoptar  una ley única en el mundo. Sin embargo, la noticia ha pasado totalmente desapercibida por la mayoría de los medios nacionales, incluso  internacionales. Me refiero a la Ley de redistribución de los ingresos del gasto social, mediante la cual la banca ecuatoriana debe pagar al fisco el 12% del impuesto al valor agregado IVA por los servicios financieros que llevan gravámenes sobre los fondos depositados en el extranjero, ello para financiar parte del incremento del denominado “Bono de desarrollo humano”.  Es decir, éste país logra convertir un sueño planetario en  una realidad, esto es, socializar parte de las utilidades de los bancos.  El bono del cual hablamos es entregado por el gobierno a madres, personas discapacitadas y otros sectores necesitados de la población, y se incrementó este año en 15 dólares per cápita, es decir su costo total se incrementó en 300 millones de dólares, de los cuales 160 se obtendrán mediante esta socialización de utilidades bancarias. Pero aquí no queda el asunto: la misma ley pone techo a los salarios de directivos bancarios, muchos de los cuales devengan hasta 70 mil dólares, a decir de los críticos, más que muchos presidentes del mundo. Y como si lo anterior fuera poco el sistema queda obligado a rendir informe de los cuentahabientes cuando el Estado la solicite para uso tributario. 
Obviamente, el reclamo de la banca privada no se hizo esperar calificando la medida de inconstitucional, discriminatoria, y causal de un peligroso detrimento del crédito en el país, para continuar con  una furiosa arremetida contra la misma a través de los medios y correos electrónicos enviados a sus clientes en donde advertía de los riesgos de la misma y  en donde además acusaba al gobierno de darle un manejo político  al sistema financiero. El propósito es tan serio  que la Superintendencia  Bancaria de aquel país multó con 7.8 millones de dólares a cuatro de los bancos más importantes por soliviantar a sus clientes en detrimento del interés público. Lo cierto es que no obstante el aporte social que el sector hace a la Nación, aún le quedan 233 millones de dólares de utilidades, es decir un 9% de rentabilidad.
En nuestro país viene sucediendo lo contrario: lo que se socializa son las pérdidas porque las ganancias se privatizan.  Recordemos 1998 con el cuento de que se tenía que salvar el sector financiero el cual  amenazaba con irse a la quiebra, nos clavaron por decreto el 2 por mil, con la promesa que sería hasta el 31 de diciembre de 1999. Pero lo que hicieron fue aumentarlo al 3 por mil. Y  como al que no le gusta el caldo le dan dos tazas, otra ley tres años después lo elevó a 4 por mil. ¡Qué rico!
Ahora, paradójicamente quien pide a gritos que lo quiten es el sector bancario, porque para su desgracia, una vez salvados, el gobierno quedó con el gustico y lo siguió cobrando pero sin darles participación, lo que ahora sí incide, según ellos, en contra de sus intereses. Lo cierto del caso es que  mientras en Ecuador las utilidades del sector en el 2011 fueron de 397 millones de dólares, en Colombia este grupo obtuvo utilidades por 5.8 billones de pesos, lo que nos daría un aproximado de 3.222 millones de dólares. Pero,  ahora sí que  no se acuerdan cuando los pobres de este país  los salvaron de la bancarrota, y de esa mazorca millonaria de utilidades que reciben cada año no colaboran al erario ni con un grano.

 

viernes, 30 de noviembre de 2012

Quién perdió con el fallo de La Haya?

Por Armando Brugés Dávila.

Lo primero que tenemos que hacer es retrotraernos en la historia y recordar que en 1904, mediante triquiñuelas políticas Estados Unidos  nos cercena Panamá; tan cierto, que el tratado que concede a Colombia una indemnización por la pérdida de Panamá no se firma con ésta sino con Estados Unidos (Tratado Thompson-Urrutia. 1922): Obviamente Colombia no quedó muy satisfecha. Una buena ocasión para darles contentillo a los colombianos se presentará el 26 de diciembre de 1926, cuando con el pretexto de ayudar a sus aliados de la derecha nicaragüense y “defender la democracia en el continente”  invaden Nicaragua. Dos años después, en plena invasión se firma el tratado Bárcenas-Esguerra, el cual compromete a Colombia a respetar la soberanía de Nicaragua sobre la Mosquitia y las islas Mangle y ésta a su vez le reconoce a Colombia la soberanía sobre San Andrés y Providencia. Si bien es cierto, estas islas pertenecieron primero a la Real Audiencia de Panamá y posteriormente a la Capitanía General de Guatemala, la verdad fue que gracias al auge que venía teniendo el algodón en España, ésta comienza a interesarse por las islas en Hispanoamérica y decide en 1803 poner no sólo a éstas sino también la Costa de Mosquitos bajo la jurisdicción de la Nueva Granada. Se sabe que en 1924 Nicaragua, se dice que presionada por USA, solicita arbitraje internacional para dirimir la soberanía sobre el Archipiélago de San Andrés, solicitud que Colombia rechaza de manera airada por considerarla improcedente dados los antecedentes históricos. Más adelante las Provincias Unidas de Centroamérica, de la cual formaba parte Nicaragua, reconocen en 1825 la soberanía de Colombia sobre la Costa de Mosquitos y la Isla de San Andrés.  No queda claro entonces la razón por la cual Colombia termina aceptando el tratado Bárcenas-Esguerra, pero bien lo podría explicar el hecho de que si bien entregaba la Costa de Mosquito, imponer el meridiano 82 como límite con Nicaragua, le embolataba a ésta, territorios marítimos y la posesión de algunas islas, bancos y cayos, algunos incluso en posesión de Estados Unidos, como veremos a continuación. 

En 1972 Colombia y USA suscriben un tratado mediante el cual el segundo le entrega a nuestro país la soberanía sobre los cayos Roncador, Quitasueño y Serrana. ¿Cómo habían llegado estos cayos a ser posesión norteamericana? Resulta que en 1856 el Congreso americano, dada la importancia del guano como fertilizante, decide aprobar el “Guano Islands Act” que autorizaba a sus ciudadanos a tomar posesión, en cualquier parte del mundo, de islas que poseyeren este tipo de depósitos, salvo que estuviesen ocupadas o bajo jurisdicción de otros gobiernos. Esta salvedad no es muy clara cuando en la misma se ordenaba  a su presidente, usar la fuerza militar si fuese necesario para defender estos derechos. En esta telaraña caen los tres cayos arriba señalados. Este tratado obviamente no le gusta a Nicaragua que protesta por considerarlo un reconocimiento a las pretensiones colombianas sobre estos cayos. Lo que generalmente no se menciona de este tratado es que Estados Unidos quedaba en igualdad de derechos con Colombia para usufructuar monopólicamente todas las riquezas del área, fauna y flora, incluyendo el subsuelo. Tanto así, que según reglamentación anexa al tratado queda claro que ambos países gozarían de la libertad monopólica de navegación y pesca en el área.  Obsérvese cómo en ambos tratados, Estados Unidos disfrazado de oveja, resulta indirectamente beneficiado.

Si analizamos con atención, el más perjudicado en este proceso, viene a ser, quien lo creyera, Estados Unidos, porque mientras Colombia queda en posesión de los cayos, Nicaragua ejerce soberanía sobre el área marítima. Incluso en el fallo de la Corte de Justicia de La Haya quedó muy claro que los pescadores de San Andrés y Providencia podrían navegar y pescar en dichas aguas por derecho propio. En cambio, los estadounidenses pierden todas las gabelas que sobre esas aguas tenían de acuerdo al tratado firmado con Colombia en 1972.

Surgen entonces varias preguntas: ¿Hasta dónde tendrá la mano metida el gobierno norteamericano en el cambio de actitud asumido por nuestros gobernantes, incluso ex gobernantes, que en principio juraban respetar  y acatar el fallo y  a las primeras de cambio resultan, de manera por demás casi irracional y por lo mismo sospechosa, retirarse del Pacto de Bogotá y desacatar el fallo? ¿A quién le estarán haciendo la vuelta? ¿Qué tanto afectará esta actitud  al ahora exitoso proceso de unidad continental suramericana y a quién  beneficiaría?

 

 

 

 

martes, 27 de noviembre de 2012

Por qué no la imitas?

Por Armando Brugés Dávila.

El 14 de noviembre sucedió un hecho realmente histórico: nunca antes el mundo había visto una protesta laboral de carácter continental; más desconcertante aún que ello sucediera en la Europa, otrora ejemplo y envidia del sector laboral en el planeta. Hace apenas 20 años, un suceso como éste sólo era posible en las películas de ciencia-ficción, tipo Planeta de los Simios. Más de veinte países se vieron involucrados en este proceso, unos más, otros menos, pero involucrados  directamente en la protesta estuvieron Grecia, España, Portugal e Italia. La represión policial que se vio por los canales de televisión en aquellos países, fue digna de cualquier país tercermundista.
En España, el gobierno tuvo que intervenir para evitar que continuaran los desalojos. En ese país, en 15 años la burbuja inmobiliaria había dejado en la calle a 6 millones de personas, 1 millón de casas vacías y miles de familias endeudadas. Desde 2008 a la fecha se han realizado 350.000 desalojos y 250.000 están en proceso. En octubre por ejemplo, se ejecutaron 526 desalojos diarios. Lo anterior ha dado como resultado que del 2009 a la fecha, 9 personas se han suicidado por este motivo. Pero se trata de una intervención que aparenta tocar pero no toca nada; la nueva ley de emergencia sólo exime del desalojo y únicamente por dos años a: 1º  Familia numerosa, de acuerdo a la legislación española. 2º Familia con un hijo menor de tres años. 3º Familia con dos hijos a cargo. 4º Cuando uno de los miembros de la familia tenga discapacidad mínima de un 33%. Pero las leyes quedan iguales. La familia queda sin casa pero con la deuda, la cual puede incrementarse por los gastos judiciales. Con razón tanto suicidio. También habla el gobierno de dar casa a los desalojados, pero como en otras partes del mundo, ese sistema corrupto y avaro no dice cuándo ni cómo. De la desocupación laboral ni hablemos.
Ante este caótico panorama, un comentarista español manifestaba que a propósito de la famosa frase  ¿Por qué no te callas? del Rey Juan Carlos I de España, la misma debería cambiársele por la ¿Por qué no imitas a América Latina?,  seguramente haciendo referencia a los cambios tan positivos que se vienen mostrando en esta parte del mundo. En Perú, por ejemplo, el Instituto de Estadística y Finanzas, nos muestra un crecimiento anualizado del 6.1%. De la economía colombiana se habla maravillas en la península. Bolivia por primera vez en sus doscientos años de historia presenta superávit presupuestal. Mientras en Venezuela la Gran Misión de Vivienda que había programado la entrega de 350.000 viviendas, finalizando este año ya lleva un 80% de su proyecto cumplido y tienen programado para entregar 33.000 en este mes y otras 34.000 en diciembre. Entre 1999 y 2012, en este país se generaron cuatro millones de nuevos puestos de trabajo, disminuyendo el desempleo de un 27% a un 7.3%.
Llama la atención que una propuesta similar, pero al contrario, la hizo al notablato criollo grancolombiano, a comienzos del siglo  XIX, el profesor Simón Rodríguez, cuando les dijo: “Vean la Europa cómo inventa, y vean nuestra América cómo imita. La América no debe imitar servilmente, sino ser original. ¡Pero ya que tratan de imitarlo todo, imiten la originalidad de la Europa”. Las vueltas que da la vida.

 

 

 

 

 

 

 

domingo, 18 de noviembre de 2012

Por qué no el Nobel a Llinás.

Por Armando Brugés Dávila.

Cuando Karl Popper, austriaco nacionalizado en Gran Bretaña,  predijo en su ensayo sobre el cerebro que los humanos nunca podríamos llegar a comprenderlo puesto que se trataba de un órgano complejo tratando de explicarse a sí mismo, el mundo científico se enmudeció. Popper era considerado en ese momento el ícono de la cultura occidental imperante. Personalmente me atrevería a decir que se trata de uno de los últimos científicos respetables con concepción dualista del mundo. Los títulos de dos de sus trabajos más importantes así lo demuestran: El yo y su cerebro y El cuerpo y la mente. El primero lo escribe en compañía del neurobiólogo John C. Eccles, con quien posteriormente trabajó Rodolfo Llinás en la Universidad Nacional de Australia.

Esta idea se mantuvo hasta el momento en que aparece en la palestra el monista colombiano, diciendo que a su parecer el cerebro sí era un órgano muy complejo, pero que él confiaba en que resultaría más inteligente que complejo. De aquí en adelante las teorías sobre el funcionamiento del cerebro dieron un vuelco total. Llinás se convirtió en la figura estelar de la Neurología: sus investigaciones eran reconocidas en todo el planeta por su originalidad y trascendencia. Sus amigos en todo el mundo no se explicaban el porqué al colombiano no se le había otorgado el Nobel de Física, no obstante haber estado nominado en varias ocasiones. Algunos colegas estadounidenses, como queriendo paliar la situación, comentaron en su momento que tal distinción no le había sido entregada debido a que su trabajo era tan extenso y complejo que resultaba casi imposible sintetizarlo.

Se dice que su legado vuelve trizas las ideas que se tenían sobre este órgano, único en el universo, al punto de generar un nuevo paradigma en cuanto al entendimiento de nosotros mismos y de la forma en que interactuamos con la realidad. Tanto así, que en este mes España le otorgará  la Medalla de Oro del Instituto de Investigación de España. Honor que sólo se le ha concedido a tres neurobiólogos, a quienes previamente  se les había concedido el Premio Nobel.

Siempre tuve la inquietud de cómo era eso de que su trabajo era tan extenso y complejo que resultaba imposible sintetizarlo; posteriormente me percaté que eso no era cierto, porque Llinás ha hecho aportaciones importantísimas al mundo de la Neurología, entre la que se puede destacar La Ley de la no intercambiabilidad de neuronas, más conocida como la Ley de Llinás. Según esta ley, las neuronas de un determinado tipo, neurona talámica por ejemplo, no pueden ser funcionalmente remplazada por una de otro tipo, caso neuronas de la oliva inferior, aun suponiendo que su conectividad sináptica y el tipo de neurotransmisor liberado sean idénticos, esto debido a que las propiedades electrofisiológicas intrínsecas son diametralmente distintas.  Hasta ese momento en el ámbito científico se aceptaba como cierto que sólo las conexiones y los neurotransmisores liberados por las neuronas determinaban las funciones; el colombiano demostró que el concepto estaba errado. Como este descubrimiento otros 15 de igual o mayor importancia han sido aportados por este hombre de ciencia al conocimiento universal.

La respuesta la dio el mismo Llinás en una entrevista concedida recientemente a un periodista en Colombia, a quien al preguntarle sobre el tema, le respondió:  “A lo mejor en Suecia se preguntarán: ¿Qué ganamos dando un Nobel de Física en Suramérica? Un Nobel de literatura es muy diferente. Un premio Nobel en Ciencias, para un país  suramericano, sería una bomba atómica”.

Como diría cualquier costeño: ¡Carajo, zipote respuesta tan clara y contundente!

 

 

 


 

 

martes, 13 de noviembre de 2012

Los supuestos no son buenos consejeros.

Por Armando Brugés Dávila.

A propósito de la homofobia que se ha despertado en el país y de la absurda petición del pastor Concejal de Bogotá a Canal Capital, solicitándole la lista del personal LGBTI que allí labora, bien se puede decir que esto solo es posible  cuando existen niveles muy pobres de educación, pero sobre todo un muy bajo interés por conocer lo que sucede en el ámbito científico mundial. La creencia de que la homosexualidad o y  el lesbianismo, por ejemplo, son el resultado de aberraciones de los seres humanos, por fortuna cada día tiene menos adeptos, gracias a que la ciencia ha venido aclarando que los mismos tienen un fuerte componente biológico. De acuerdo a lo expuesto por la National  Geographic, un grupo de científicos suecos del Karolinska Institutet realizaron en este año un estudio con 90 hombres y mujeres de distintas tendencias sexuales, encontrando que el cerebro de los homosexuales es más parecido al de las mujeres heterosexuales, pero que su frecuencia de onda se asemeja a la de los cerebros de las lesbianas. Es más, la investigación encontró que mientras en el cerebro de los heterosexuales el hemisferio derecho siempre se muestra más desarrollado que el izquierdo, en los varones homosexuales, estos hemisferios se encuentran más equilibrados, hecho similar a lo que sucede en los cerebros de las mujeres heterosexuales, mientras que el cerebro de las lesbianas es muy similar al de los hombres heterosexuales.
Pero esto no es nuevo, en 1998 la periodista Rita Carter, especializada en temas de medicina, en su libro El nuevo mapa del cerebro, nos dice que  en 1991 la revista Science  dio a la luz pública un estudio de Simón LeVay, profesor asociado en el Instituto Salk para Estudios Biológicos y profesor adjunto de biología en la Universidad de California, que una vez estudiados unos cerebros pertenecientes a homosexuales muertos de sida, estos revelaron  que eran estructuralmente distintos al de los hombres heterosexuales. El investigador encontró que el núcleo del hipotálamo, que desencadena el comportamiento sexual típicamente masculino, era mucho más pequeño en los homosexuales que en los heterosexuales, siendo similar su tamaño al que se encuentra en el cerebro femenino. Igualmente descubrió que el Cuerpo Calloso en los homosexuales es también más grande. Así mismo, la periodista señala que tres años después, el biólogo molecular Dean Hamer encontró una evidencia que sugería que un gen determinado, transmitido por línea materna, influenciaba la orientación sexual de los hombres.
Luego, todo apunta a demostrar que la homosexualidad tiene una fuerte fundamentación biológica y que los argumentos culturales y de aprendizaje, que siempre le han endilgado sectores religiosos y puritanos, no juegan mayor papel. Lo que sí no parece estar muy claro aún, de acuerdo a los investigadores suecos, es si su desarrollo se genera a nivel genético, fetal o posnatal. Pero como dice la filosofía popular, no hay peor ciego que el que no quiere ver. El infortunio del ser humano homofóbico radica en que no contento con serlo, adopta posturas sectarias y es en esta realidad conceptual en donde los supuestos resultan fatales para la convivencia.

 

 

 

 

 

 

 

sábado, 3 de noviembre de 2012


Sociedad Bolivariana y Archivo Histórico.

Por Armando Brugés Dávila.

Dadas las muchas inquietudes que generara mi artículo en torno a la suerte del Archivo Histórico del Magdalena y enterado del heroico logro de la restauración de la sede de la Sociedad Bolivariana, me embargaron dos sentimientos y se me ocurrió una respetuosa propuesta. Me embargó la nostalgia, al pensar que durante los 3 años que estuve presidiendo la sociedad no pude alcanzar tan caro objetivo, no obstante que le trabajé a dicho propósito con verdadero amor bolivariano. Recuerdo cómo de manera estoica en más de una ocasión  me tocó hacer cola, como cualquier desempleado, a políticos influyentes de la época  para que colaboraran y no tuviera la ciudad que pasar por la vergüenza de tener que devolver la sede al Ministerio de Cultura. Vergüenza porque resultaba inexplicable que Santa Marta, la ciudad en donde pasara a la inmortalidad  El Libertador Simón Bolívar, a propósito hoy más vigente que nunca,  la sociedad encargada de mantener su memoria, no contara con una sede decente en donde turistas extranjeros y nacionales, historiadores y jóvenes estudiosos de las ciencias políticas, fueran recibidos en primera instancia, antes de adentrarse al mítico mundo de San Pedro Alejandrino, dolorosamente convertido hoy en centro de agasajos y reuniones sociales privadas. Pero mis prácticas de lobby infortunadamente no dieron los frutos esperados. Sus ayudas consistieron en migajas que no servían casi que absolutamente para nada. Pero también sentí orgullo, porque estoy seguro que sin la guía de mi dilecto amigo Ramón Palacio Iguarán, presidente de la corporación, los estudiantes de la Escuela de Derecho  “Rodrigo Noguera Laborde” no hubiesen alcanzado tan importante logro.  Gracias Ramón, por haber logrado  semejante regalo para la ciudad. Ella no tendrá cómo agradecértelo y los bolivarianos siempre lo recordaremos con gratitud. Bien valdría la pena instalar allí una placa de mármol con los nombres grabados de los jóvenes hacedores de la acción popular y el tuyo como fuente de inspiración.
Asimismo la respetuosa propuesta radicaría en solicitar a estos jóvenes estudiantes, que pensaran en la posibilidad de elaborar una acción de tutela cuyo propósito ahora sería la salvación del Archivo Histórico del Magdalena. Se trata del archivo más importante del área del Caribe por su documentación, pero que gracias a la desidia de las administraciones locales, igual a como actuaron cuando se les solicito el rescate de la sede de la Sociedad Bolivariana, se está perdiendo en los cuartos del antiguo hospital San Juan de Dios, donde se encuentran tirados y sometidos a la humedad de las aguas lluvias que se filtran por sus techos. La misma situación que vivía la Sociedad Bolivariana que se caía a pedazos antes de su hermosa restauración. Esta sería una maravillosa manera de pagar una deuda moral que la  Universidad Sergio Arboleda tiene con el Archivo Histórico del Magdalena.  Santa Marta, y en este caso también el Magdalena, tampoco tendrían, como ahora, con qué pagarles semejante aporte a la cultura local y regional.

 

domingo, 28 de octubre de 2012

El oso de la Unión Europea.

Por Armando Brugés Dávila.

No quisiera pasar por alto esto del Nobel a la UE por las trascendentales connotaciones que el hecho tiene a nivel planetario, dado que con ese acto no han hecho sino ratificar la poca vergüenza de que son capaces los poderosos cuando quieren aparentar lo que no son ni han querido ser jamás.
Europa nació con ansias imperiales, afortunadamente para el resto del mundo no logró consolidarse como unidad continental, si no las consecuencias hubieran sido mucho peores para nosotros. Su egoísmo primario se losimpidió. Sólo en época reciente, cuando se encuentra al borde del colapso lo ha intentado, pero con lamentables resultados. Grecia, España, Portugal, Francia, Italia, incluso la misma Inglaterra son buenos ejemplos de la debacle.
El oso radicó, primero por el auto-otorgamiento. Eso no se ve bien ni en los juegos de niños; lo digo porque precisamente quien lo otorga es Suecia, país perteneciente a la U.E., lo que quiere decir que era lo mismo de lo mismo. Y  segundo, por las razones a las que apeló para justificar su concesión diciendo que lo hacía “por sus más de seis décadas de contribución al avance de la paz y la reconciliación, la democracia y los Derechos Humanos en Europa”, añadiendo además que “el atroz sufrimiento de la Segunda Guerra Mundial demostró al mundo la necesidad de una nueva Europa”. La Unión Europea no tiene seis décadas, cuando mucho dos y mal contadas, dado que su constitución se concreta en 1993. Hablar de avances democráticos en Europa no resulta fácil, la UE cuenta con siete monarquías, que constitucionales o no, sus aparatos no dejan de ser monárquicos. Pero a ellas nadie les critica y ahora resulta que son ejemplos de democracia. De igual manera en lo concerniente a Derechos Humanos, las masivas manifestaciones que hoy se producen en algunos de sus países integrantes parecen mostrar lo contrario. Ahora, decir que “los sufrimientos generados por la segunda guerra mundial le demostró al mundo la necesidad de una nueva Europa”, no es nada fácil entender. Aquella horrible conflagración  lo que hizo fue hacerles caer en cuenta que como iban se estrellarían, porque sus luchas intestinas les estaba impidiendo lo que unos y otros querían pero para sí  únicamente, esto es, la gran tajada del dominio mundial.  Por eso, finalizada la Segunda Guerra Mundial se funda la ONU, en donde una de las primeras determinaciones que se tomaron las potencias victoriosas fue la de abrogarse la prerrogativa del derecho al veto en el Consejo de Seguridad. Pero si bien es cierto, los países europeos en estos últimos tiempos no han peleado entre sí, la UE ha participado en cuanta guerra se ha suscitado fuera de su territorio a través de la OTAN; recordemos entre otras las de Irak y Libia, cuyos fondos nacionales, que no de Hussein ni de Gadafi, valorados en miles de millones de dólares,  que se encontraban en sus bancos, fueron confiscados,  y al parecer posteriormente desaparecidos como por arte de magia, tanto así que  hoy día nadie sabe nada de esas millonarias sumas, mientras que Europa y con ella la UE se debate en la crisis económica más grave que recuerde su historia.
Si alguna organización merece esta distinción, ella es Suramérica. Territorio que con la constitución de UNASUR, ha venido dando ejemplo al mundo de cómo a través del diálogo se pueden resolver las diferencias, entre las que podemos recordar, el conflicto entre Venezuela y Colombia y la sublevación con qué el sector derechista de la policía ecuatoriana intento derrocar a su presidente constitucional Rafael Correa; sin olvidar que es el único territorio del planeta que mediante el Tratado de Tlatelolco, se ha comprometido a no tener armamento nuclear. En otras palabras, Suramérica tiene más méritos que la UE para un Nobel de Paz. Pero ni siquiera la propusieron.

Nota: Si no deseas recibir mi blog infórmamelo, pero si te parece interesante difúndelo. 

 

 

 

domingo, 21 de octubre de 2012

El pueblo le falló a Chávez.

Por Armando Brugés Dávila.

La primera vez que le vi en persona fue en el sagrado recinto  de la Quinta de San Pedro Alejandrino, eran los tiempos en que Hugo Chávez, había sido elegido por primera vez presidente y hacía su primera visita al histórico sitio. Su cara no me inspiró confianza alguna, a lo que pudieron contribuir sus facciones toscas de labios gruesos y nariz de grandes orificios. Para mis adentros pensé: Este no es sino otro farsante de la política criolla latinoamericana.

Tiempo después hice un viaje de turismo a Venezuela, con la idea del Chávez dictador que me habían creado los medios. En Caracas, extrañamente, me encontré que el tirano, contra toda lógica, era criticado, fustigado y acosado por cuatro o cinco canales nacionales de televisión privada, que no lo bajaban de diablo. Igual hacían dos o tres periódicos, también de circulación nacional; esto sin hablar de los medios de provincia. Y nada les pasaba. Era la época que en nuestro país, por el contrario, periodista que se atrevía a cuestionar al presidente terminaba, por fuerza de las circunstancias, en el exilio. Era como buscando el muerto río arriba.

Por estos días, ese personaje que los medios europeos, estadounidenses y algunos latinoamericanos, no bajan de dictador, tuvo al mundo en ascuas, con motivo de su aspiración por tercera vez a la presidencia de su país. Diez mil periodistas de todo el planeta se dieron cita en Venezuela, con el único propósito de monitorear el proceso electoral que allí se llevaría a cabo el 7 de octubre. Estas son palabras mayores. Contra todo lo pensado por el establecimiento de la derecha mundial, Chávez sale elegido por una votación de ocho millones de votos. Mi pregunta, entonces es, por qué? Y me encuentro con datos como que en Venezuela, en los últimos 10 años la educación pasó a ser gratuita desde la primaria hasta la universitaria. Obviamente que también existe la educación privada. Igualmente en el mismo lapso a nivel nacional se fundaron 20 nuevos centros universitarios estatales. Este año su territorio fue declarado por la UNESCO libre de analfabetismo. La CEPAL lo reconoce como el segundo, país en América Latina con menos desigualdad social, en donde la pobreza se ha reducido del 49.4 % a un 27.8%. El periódico londinense The Guardian, por su parte, señaló que la pobreza extrema de 23% en 1999 se redujo al 8.5% en 2011. Igualmente el desempleo se redujo de 14.5% al 7.6%, mientras que el producto interno bruto (PIB) por habitante pasó de 4.100 dólares a 10.810. En aquel país la tierra cultivable se incrementó en un 49%. Actualmente 27 millones de hectáreas son utilizadas para la agricultura. El consumo de alimentos se aumentó en un 27,24 % en los últimos doce años. En estos días la FAO manifestó que el país es  líder en el tema de la alimentación señalando que un 98%  de su población come tres comidas por día. Por si lo anterior fuera poco, Venezuela le ha dado un ejemplo de juego limpio al mundo político, al presentar un sistema electoral al que ninguna entidad o persona seria en el planeta ha sido capaz de cuestionar. Los anteriores logros no son fáciles de encontrar en el tercer mundo, incluso ahora mismo ni en muchos países del llamado primer mundo, por lo que definitivamente se podría decir que el pueblo venezolano le falló a Chávez: ocho millones de votos resultan pocos ante alcances tan positivos. Alguien dijo que con petróleo todo era fácil, pero resulta que antes también lo había, pero nada se hacía, la plata se esfumaba. Gústenos o no esto es lo que está sucediendo en el vecino país. Así de sencillo.

 

 

 

domingo, 14 de octubre de 2012

Con legisladores así, para qué democracia?

Por Armando Brugés Dávila.

Aprovechando la distracción que tuvo la opinión pública nacional a raíz de los comicios electorales en Venezuela, los legisladores de la Cámara de Representantes, de manera soterrada e infame le pusieron conejo al país, archivando el proyecto de reforma constitucional que convertía en derecho fundamental el acceso a la salud para todos los colombianos. En el proyecto se decía que: “La vida como la salud deben ser garantizadas y protegidas por el Estado y no por los particulares”. De acuerdo al ponente, el representante Pablo Salamanca, la vida y la salud no deberían ser transables, y mucho menos tratadas como mercancías sujetas a las leyes del mercado o a la voracidad económica de los empresarios privados. Y tiene toda la razón, si observamos la legislación que al respecto tienen algunos países de la región.
En Bolivia, por ejemplo, la Constitución en su artículo 9º numeral 5º dice que el Estado garantiza el acceso de las personas a la educación, a la salud, a la educación y al trabajo. En lo que concierne a Ecuador, nos encontramos que en su artículo 42 el Estado no sólo garantiza el derecho a la salud, sino también a su promoción y protección por medio del desarrollo de la seguridad alimentaria, la provisión de agua potable y saneamiento básico… y la posibilidad de acceso permanente e ininterrumpido a servicios de salud, conforme a los principios de equidad, universalidad, solidaridad, calidad y eficiencia. Por su parte en Venezuela, su Constitución establece que el sistema público nacional de salud dará prioridad a la promoción de la salud y a la prevención de las enfermedades, garantizando tratamiento oportuno y rehabilitación de calidad. En Brasil, mientras tanto, la Constitución garantiza la asistencia sanitaria como un derecho de todos y una obligación del Estado, lo cual significa que corresponde al Gobierno su regularización, fiscalización y control, independiente de su aplicación directa por parte del mismo, dejando claro que si bien la empresa privada puede participar en su aplicación, sólo podrá hacerlo de modo complementario.
Pero qué dice el artículo 48 de nuestra Constitución? “La Seguridad Social es un servicio público de carácter obligatorio que se prestará bajo la dirección, coordinación y control del Estado, en sujeción a los principios de eficiencia, universalidad y solidaridad, en los términos que establezca la Ley.” Lo anterior significa que la seguridad social en nuestro país, independientemente de lo que arriba se señala, queda en manos de la empresa privada. Así de simple. Esto explica el porqué se hundió el proyecto de reforma constitucional que convertía en derecho fundamental el acceso a la salud para todos los colombianos, sencillamente porque acababa con el inhumano modelo empresarial de la salud  por la  cual esta seguirá teniendo el carácter de negocio privado. Esa figura, perversa, terminó convirtiéndola en fuente inagotable de corrupción. Permite que las EPS desvíen más de 10 billones de pesos anuales en inversiones que nada tienen que ver con ella. De igual manera, permite la vinculación de sus empleados a través de cooperativas de dudosa ortografía, con lo que evaden compromisos laborales, supuestamente inviolables al tenor de nuestra Constitución. Y como si lo anterior no fuera suficiente, este modelo nefasto, ha permitido, por ejemplo, convertir la cesárea, en un negocio redondo para muchos galenos inescrupulosos  Pero no; en este modelo de democracia representativa no está pasando nada; Aquí todo es paz y en el cielo gloria.
Aunque un poco tarde, no quiero finalizar este artículo sin ofrecer mi voz de solidaridad a los colegas periodistas que han sido amenazados por cumplir con valentía, decoro  y dignidad  su compromiso con la comunidad. Adelante que el camino es largo.
 
 
 

 

 

 
 

 

 

domingo, 7 de octubre de 2012

El Archivo Histórico: una vergüenza impresentable.

Por Armando Brugés Dávila.

En estos días he sentido dolor de patria al enterarme que el archivo histórico localizado en el antiguo Hospital San Juan de Dios se está botando a la basura por camionadas, a consecuencia del agua lluvia filtrada por los techos de sus instalaciones.
Recuerdo que en 1998 escribía con júbilo, en este mismo Hoy Diario, que la intelectualidad del Magdalena y especialmente la de Santa Marta, se encontraba feliz  con la noticia de la iniciación de lo que podría considerarse la obra cumbre de la Academia de Historia del Magdalena: la creación del Archivo Histórico.
Gracias al tesón y empeño del médico e historiador Arturo Bermúdez Bermúdez, en aquel entonces presidente de la Academia de Historia, dos entidades nacionales habían decidido hacer importantes aportes para ello: Colcultura con ocho millones y medio y el comité del V Centenario con dos millones y medio, para un total de once millones de pesos, ambos con la destinación específica de reparar y adecuar la antigua Escuela de Readaptación de Menores, local donde debería funcionar el Archivo Histórico y Regional del Magdalena, habida cuenta  que la documentación histórica existente en Colombia estaba considerada como la más importante en Hispanoamérica después de México, y que en lo que a nuestro interior  correspondía, la documentación del archivo histórico del Magdalena era considerado por los expertos como el más importante del país. Es más, por su planta física y riqueza documental, el Consejo Nacional de Archivos lo tenía  señalado como la futura sede del Archivo Histórico de la Costa. Pero, cuando todo era felicidad, se comenzó a filtrar un rumor que parecía no tener sentido: una entidad universitaria de carácter privado, a la que se le habían adjudicado dichas instalaciones, pero que en su momento, por razones que en su momento desconocimos, no quisieron asumir la responsabilidad, resultaba ahora reclamando dicho derecho no obstante haber finiquitado el tiempo para validar el comodato que se le había otorgado. Pero como en este país,  la política y el lobby pueden más que cualquier otra cosa, nos tocó salir de allí con todo. Sólo la estantería se salvó porque no había ingresado al edificio. El local fue cedido a la Universidad Sergio Arboleda y el Departamento perdió la posibilidad de contar con unas instalaciones adecuadas para que funcionara el Archivo Histórico del Magdalena Grande, considerado uno de los más valiosos del área del Caribe. Al parecer, a los administradores de la cosa pública magdalenense y mucho menos a la samaria, les cupo en la cabeza que un archivo de carácter histórico como el que poseía el Magdalena era un atractivo turístico y científico de primera línea tanto a nivel nacional como internacional.
Ahora resulta que cada minuto que pasa, ante la mirada oligofrénica de nuestros administradores públicos, cientos de documentos que recogían gran parte de nuestra experiencia como pueblo, se pierden por simple y llana incapacidad de estos chupasangres de la administración pública. El que fuera el más importante archivo histórico del Caribe esta reduciéndose, en tiempo record, a su más mínima expresión. Como población no podemos ser más infame con nosotros mismos, al permitir que esto suceda y sigamos votando por los mismos.

 

 

 

 

domingo, 30 de septiembre de 2012

La insensatez puede ser la destrucción de Venezuela.


Por Armando Brugés Dávila.

Desde que comenzaron los primeros escarceos de las elecciones en Venezuela, se comenzó a notar una cierta tendencia a  querer deslegitimar las elecciones, si el ganador resultaba siendo el candidato Chávez; todo como consecuencia de un supuesto fraude en el proceso electoral. Es más, hace pocos días escuché al candidato Capriles, manifestar que sus partidarios estaban organizando grupos que saldrían a las calles  si el gobierno no quisiera reconocerles el triunfo, dejando con ello un peligroso manto de dudas sobre la seriedad del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela,  que pudiera servir para justificar  a la larga el surgimiento de focos de violencia al interior del país que en nada bueno podrían terminar.

Hasta donde tengo conocimiento, una “misión de acompañamiento” fue solicitada a UNASUR por el gobierno venezolano, para seguir los comicios, la cual se encuentra integrada por funcionarios judiciales y magistrados altamente calificados de diferentes países, lo que le da garantía de imparcialidad y confiabilidad. De igual manera, la presidenta del ente comicial venezolano informó sobre la presencia de representantes de la Unión Africana de Naciones, además de unas 157 personalidades invitadas, que también servirían de garantes del proceso. En reciente visita, el titular de la misión de acompañamiento de la Unión de Naciones Suramericanas manifestó: “el sistema electoral venezolano es altamente confiable en todos los sentidos posibles. Tanto así, que las últimas cuatro elecciones se caracterizaron por la transparencia, donde nadie discutió los resultados y no se cantó fraude, gracias al sistema electoral que no permite que lo haya”.

Pero si lo anterior no fuera suficiente, nos encontramos con que  el ex presidente estadounidense Jimmy Carter, en un conversatorio anual en el Centro Carter, fundación presidida por él, aseveró que el proceso de elección en Venezuela era el mejor del mundo, conclusión a la que había llegado, según él, después de haber monitoreado más de 90 comicios en diferentes países del globo. Allí felicitó a Venezuela  por contar con semejante automatización de votación capaz de arrojar una boleta en físico y facilitar la verificación de los resultados. Y terminó llamando la atención en el hecho de que mientras en América Latina, los procesos comiciales habían mejorado ostensiblemente, en su país, éste  ha ido poco a poco siendo amordazado por un  cordón financiero que lo ha convertido en uno de los más corruptos del mundo, debido a la excesiva entrada de dinero, mediante las eufemísticamente denominadas “donaciones anónimas”.

A la declaración del señor Capriles, se le suma el sospechoso hecho de que dos encuestadoras venezolanas aparecen en estos días dando un empate técnico entre Chávez y la oposición, y esta es las que nos hacen conocer los medios locales. Más de una, entre nacionales e internacionales le dan al primero una ventaja hasta de 20 puntos, razón por la cual bien podemos pensar que algo se está cocinando entre bambalinas. No olvidemos que Venezuela posee la reserva petrolera más grande del mundo y que los super desarrollados centros de producción mundial requieren tanto de este combustible que están dispuestos a lo que sea para obtenerlo. Irak y Libia, sin olvidarnos de Siria e Irán,  son unos ejemplos muy concretos y recientes. La oposición venezolana no puede cometer la necedad de hacerle el juego a las grandes transnacionales,  coadyuvando a  convertir a su país en otro horno crematorio de guerra planetaria, en donde ellos sólo tendrán derecho a poner los muertos y a aportar la destrucción física de su patria, la misma por cuya independencia y soberanía  dieron su vida Bolívar y Sucre. Hacerlo, no les daría derecho sino al mísero título de traidores. Sólo aspiro a que esa oposición, a la que considero valerosa por el simple hecho de serlo, sea más inteligente que tonta.

 

 

lunes, 24 de septiembre de 2012

De Suráfrica a la Procuraduría.



Por Armando Brugés Dávila.

No es fácil entender que  haya sucedido semejante masacre de  mineros por parte de la fuerzas armadas sudafricanas y que el  mismo gobierno que  instaurara Nelson Mandela, después de tantos años de lucha, incluidos  27 años de cárcel, para consolidar una democracia multirracial,  termine aduciendo leyes de la época del Apartheid para justificarla. La política monopólica-racista  impuesta por el partido Nacionalista en 1948 y que supuestamente había sido derrotada por el movimiento mandelista, surge ahora como el ave fénix, anunciando su no desmantelamiento de la vida política surafricana. Con el ascenso al poder de Mandela en 1994, los sectores que lo detentaban  en el pasado  lo que hicieron fue mimetizarse y mantenerse tras bambalinas en espera de mejores oportunidades. Comienzo a creer que el premio Novel y los muchos premios internacionales concedido a este señor, han sido más bien contentillo de la extrema derecha, por haber logrado el milagro de cambiar a Suráfrica para que todo siguiera igual. Algo similar sucedió en USA con Obama, incluido el Novel. En mi concepto, el establecimiento en Suráfrica quedó intacto. Los negros quedaron con el gobierno, como justificación de la existencia de una democracia racial, pero el poder como tal quedó tan concentrado como antes.
En Perú de otra parte, el presidente Ollanta Humala en su último discurso de campaña prometía el cambio, la gran transformación de la patria, la muerte del continuismo que tanto daño le había hecho al país con su fardo de corrupción. Esto último, según él, significaba cerrarle el paso a esos que habían tenido y tenían el poder y que ahora decían que iban a cambiarlo todo. En Cajamarca se comprometió a no dejar que la avidez del oro acabara con las fuentes de agua de las que dependía la agricultura, la ganadería y la existencia misma de la región y por esa razón su compromiso sería con la defensa del cerro Quilish. Hoy día, sus electores no lo bajan de traidor; según ellos, un 70% de sus ministros son fujimoristas. La situación es tan ostensible que hasta sus mismos padres le dan igual calificativo. ¡Que tal!
En nuestro país tenemos el caso de la Constitución, la que en su momento fue recibida con alborozo por unos y criticada por otros. Pero mentiras; todo estaba fríamente calculado. La misma se estructuró de tal manera que casi toda había que reglamentarla  a futuro y esta reglamentación, en un 90% nunca llegó. Las que sí llegaron, y  por paquetes, fueron las reformas a la misma, haciéndolo de tal manera que ya no quedan sino harapos de la que se firmó en 1991. Para cerrar con broche de oro, el partido liberal colombiano a través de uno de sus representantes en el congreso  se ufana  de que su voto será unánime a favor de la reelección de uno de los más reconocidos representantes de la extrema derecha de este país. Así el presidente de dicha colectividad diga que eso no está definido aún, todo parece indicar que sí. Por algo le dicen Simón el bobito.  Claro que esto no es de extrañar si recordamos que fue por el voto del senador Gustavo Petro, representante de la izquierda colombiana, que el señor Ordoñez llegó a la Procuraduría. 

lunes, 17 de septiembre de 2012

El fundamentalismo religioso, un lastre de la humanidad.

Por Armando Brugés Dávila.

Cuando  creíamos que sólo quedaban rezagos de las brujas en películas y dichos populares tales como:”De las brujas se dicen que no existen, pero de que las hay las hay.” Nos encontramos con que  en pleno siglo XXI en un municipio (Santa Bárbara) de uno de los departamentos (Antioquia) más desarrollados de este país, miembros de su comunidad quemaron viva a  una mujer por considerarla culpable de las brujerías que algunos parroquianos decían que padecían. Se trata de algo realmente triste y desconcertante. En otras palabras, como en la nefasta época de la inquisición, a unos desquiciados se les da por quemar a una señora, soltera y sin hijos, porque se les metió en la cabeza que era bruja. Pero lo que más confunde, es que lo hicieron previo el veredicto de otro brujo al que buscaron y quien señaló que efectivamente la señora era una bruja y la culpable de los males que sufrían los individuos arriba señalados. Sin embargo y a pesar de que había sido víctima de agresiones, las que ella misma había denunciado a las autoridades, estas, ni oficiales ni religiosas actuaron para evitarle a la indefensa mujer más maltratos.  Llama la atención que al suceso le hayan dado la categoría de  tragedia de género. Quede claro que a la señora no la matan por mujer, en eso tenemos que ser diáfanos, a ella la eliminan por bruja.  Esta categorización de género lo único que logra es evadir el problema en sí y nos conduce a un callejón sin salida, al no poder  encontrar la solución al mismo al no saber de qué se trata. Esto no tiene nada que ver con el género, esto tiene más que ver con una sociedad enferma en lo que mucho tiene que ver  una ignorancia crasa, resultado de la no existencia de un proceso de escolaridad, o la existencia de una escolaridad distorsionada por intereses mezquinos, todo esto aunado al fomentos de un fanatismo religioso del más irracional oscurantismo El comportamiento de estas personas es exactamente igual al de los fanáticos cristianos católicos en la edad Media, que en su momento instituyeron la tristemente célebre Inquisición para combatir la herejía y que se extendió de 1184 hasta 1521.  Pero en lo que tiene que ver con la brujería se inició con Inocencio VIII, quien en 1484 en la bula “Summis desideratis afecctibus” no tuvo inconveniente en manifestar, obviamente basado en rumores, que muchos hombres y mujeres no evitaban el fornicar con los demonios y que con sus brujerías podían hacer perder a las mujeres y animales la capacidad de procrear, y a la tierra su fertilidad. Con semejante fundamentación quién dijo miedo. Absurdo ideológico que llega a su máxima expresión con la elaboración por parte de los dominicos del “Malleus Maleficarum” (Martillo de las brujas) el cual, aunque nunca fue reconocido por la iglesia, sí fue utilizado por ella durante casi 200 años, en su alucinante cacería de brujas en todo el orbe cristiano. No fueron pocos los quemados en la hoguera tanto en Europa como en América acusados de semejante disparate conceptual. Juana de Arco, resulta ser un buen ejemplo de ello. Situación que dejó de tener vigencia hace unos 500 años, pero que infortunadamente en algunos sectores de nuestro país sigue vivita y coleando. Manera de pensar que  puede resultar funesta en estos momentos de diálogo y concertación en aras de la paz nacional.

Y cuando aún no nos habíamos recuperado de semejante acto de barbarie sucedido en nuestro país, los noticieros internacionales nos sorprenden con que un Embajador americano y tres de sus colaboradores habían sido asesinados al interior de su sede diplomática de la ciudad de Bengasi, segunda ciudad de la otrora floreciente república de Libia y en su momento baluarte de los que combatían contra Muammar al-Gaddafi.  Por lo que en un principio la noticia tenía visos de ser falsa. Pero resultó siendo cierta. Irónico resultaría que las armas utilizadas en este irracional acto de barbarie fueran de las mismas que el gobierno americano diera a los “rebeldes” que derrocaron a Gaddafi. El caso fue que a los fundamentalistas islámicos les pareció infamante que por internet se exhibieran apartes de una película titulada “La inocencia de los Musulmanes”, en la que el profeta Mahoma es señalado como pedófilo, homosexual y corrupto. Realizada por un cineasta israelí-estadounidense, de 56 años, Sam Bacile, residente en California. Al parecer promovida por un movimiento anti musulmán al que pertenece el mencionado señor, para quien “el islam es un cáncer” y “una religión odiosa”. Bacile quien al parecer se encuentra escondido, sólo atinó a decir que se trataba de una película política, no religiosa. . Una manera muy torpe de defender su acción, dado que estas dos formas de ideología, cuando juegan al fundamentalismo, tienden a retroalimentarse la una de la otra. Algunos sectores opinan que bien podría ser una estratagema del gobierno de Israel para cambiar la opinión de USA en torno a un ataque nuclear a Iran.Ojalá los seres humanos seamos capaces de superar estos fundamentalismos y evitemos el holocausto nuclear al que parecen estar muy inclinados estos desadaptados religiosos.

 

 

 

lunes, 10 de septiembre de 2012

Entre el río Manzanares y Falcao García.

Por Armando Brugés Dávila.

Aprendamos historia con el futbol para no embrutecernos tanto. Démosle vuelta a la arepa y que el circo que nos brindan las transnacionales deportivas y financieras del mundo, en cuyo epicentro se encuentra la FIFA,  nos sirva para aprender de donde arranca nuestra triste realidad. Somos el producto y la consecuencia de una invasión que todavía nos pesa.
Esta historia se inicia en la época en que Tenochtitlán era una especie de megapolis  mundial  y Londres no era más que un villorrio. Es el momento  en que personajes como Alejandro VI, perteneciente a la fatídica dinastía de los Borgia, con su poder teocrático imponía la aceptación de su arbitraje en todo el mundo cristiano. Se trata del instante en que Europa inicia el reparto de una torta que se les apareció de repente  y que sale como poseída a reclamar como suya sin ningún fundamento ni vergüenza. Y a esta intencionalidad no escapó ni la iglesia, ya que en la práctica si bien la tierra,  el oro y demás riquezas serían de la Corona, los habitantes allí localizados pasarían a ser “propiedad” u “ovejas” de la pastoral cristiana. Lo que culminó con la destrucción de todo lo que pudiera explicar posteriormente el bagaje cultural de civilizaciones como los Mayas, los Aztecas y los Incas, que en muchos aspectos superaban al invasor, con el prurito de ser manifestaciones de origen satánico.

Comenzaron por donde les señalaba su naturaleza humana; esto es, acabando con la incertidumbre que les representaba un mundo totalmente desconocido, lo que lograron imponiendo a fenómenos desconocidos, nombres que lo identificaran con apariencias similares conocidas por ellos en Europa y en nuestro caso concreto en España. Esto explica el por qué nuestro río Manzanares, se llama así, la imposición fue de tal magnitud que a estas alturas de nuestra historia, desconocemos cuál pudo haber sido su nombre indígena y la explicación que estos tendrían para idealizar su presencia en el área. Pero nuestra ingratitud con el que en otros tiempos fue generoso manantial de la ciudad llega al colmo cuando nos percatamos que ignoramos por qué razón se llama así.  Se podría pensar que fue Rodrigo de Bastidas quien le puso el nombre, teniendo en cuenta que fue el primero a quien los Reyes de España le concedieron el título de Adelantado y la autorización para fundar una ciudad en esta región de Santa Marta. Sin embargo existe un pequeño problema en torno a esta posibilidad y es que el señor Bastidas era sevillano y el Manzanares de España atraviesa la ciudad de Madrid, luego no resultaba lógico suponer que un oriundo de Sevilla fuera a darle el abonado  a Madrid.  Es el Alférez Deán José Nicolás De la Rosa, quien nos viene a sacar de la incertidumbre en su obra La floresta de Santa Marta, al señalar que a raíz del atentado contra Bastidas y su posterior deceso en Cuba, es nombrado gobernador de la región Pedro Badillo, a quien acompaña  Pedro de Heredia, este sí oriundo de Madrid y quien, según el cronista, es el que titula a dicho rio como Manzanares, en memoria de aquel que cruzaba su ciudad natal en España. Lo que pasó de aquí en adelante en el continente americano fue algo espantoso. La historia no recuerda mayor grado de perversidad genocida.
Hoy día, mientras el Manzanares de España se encuentra protegido por serias y respetables medidas ambientales, el nuestro, ese que en su momento brindó vida con sus aguas cristalina y dulces, ese que brindó sus corrientes para el baño diario, ese mismo rio, por culpa nuestra,  hoy es una especie de poza séptica pública, al que nadie quiere acercarse por temor a quedar contaminado. Pero con todo y eso, seguimos siendo una región magnánima  pues a estas alturas del partido, de nuestro seno salió el mejor anticipador de pelotas en el área del mundo, Radamel Falcao García, el mismo que tiene enloquecidos a los hinchas del Atlético de Madrid, quienes incluso en un momento de euforia llegaron a proponerlo para la selección nacional de España.

 

 

 

martes, 4 de septiembre de 2012

Apoyemos el proceso de paz.

Por Armando Brugés Dávila.

 No he podido entender cómo algunos colombianos se muestren reacios a cualquier posibilidad de diálogo de paz del Presidente de la República con los grupos insurgentes; actitud que fue totalmente diferente cuando se hizo con las Autodefensas y los mismos se ufanan de ello a cada momento, mostrándola como una acción fuera de serie en la historia política del país. Pero en esto se equivocan, porque  en esta negociación  la contraparte no exigía nada  que pudiera afectar en lo más mínimo al establecimiento, antes por el contrario, se presentaban como defensores del mismo. Ahora, que si vemos lo que dice la prensa en lo relacionado con las peticiones de los alzados en armas, la cuestión no resulta tan descabellada. Personalmente considero que plantear la necesidad de una reforma agraria en un país donde para nadie es un secreto la concentración de la tierra en unos pocos, es algo que tiene sentido; pedir que se abra un debate público sobre la manera como se han venido manejando las contrataciones petroleras y mineras con las multinacionales, es apenas normal y obvio, como que se trata de la fundamentación económica del país; otra petición al parecer tiene que ver con la apertura de espacios políticos que permita una más amplia participación democrática de los colombianos. Hasta aquí no veo cual podría ser el problema realmente. Pero la actitud se entiende menos cuando caemos en cuenta que la paz es un mandato constitucional contemplado en el artículo 22 de la Carta Magna que a la letra dice: La paz es un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento.

Algunos sectores de opinión consideran que las Fuerzas Armadas podrían resultar un palo en la rueda en este proceso de paz y seguramente a ello contribuyeron las declaraciones un tanto altisonantes de su comandante cuando dijo a los medios de comunicación que la paz solo era posible en los campos de batalla con la derrota del enemigo. Realmente con una concepción semejante jamás se alcanzará la paz en ninguna parte del mundo; se trata de una concepción de la guerra más del siglo XVIII,  que la de un siglo XXI sumido en la incertidumbre de una hecatombe planetaria. Máxime teniendo en cuenta que tal declaración la hizo unas horas después de que el presidente de la república, comandante supremo de las fuerzas armadas, acabara de dar su guiño al proceso. Sin embargo otros más suspicaces señalan que los 24 billones de pesos que el gobierno destina anualmente en su presupuesto para la guerra, pueden ser un detalle que juegue un papel clave en esta actitud. Claro que muy seguramente puede haber algunos que al interior de la institución piensen en función de esa premisa, sobre todo en los altos niveles de mando, pero eso no quiere decir que todos o la mayoría de los miembros de las fuerzas armadas no participen decididamente de la frase del presidente: La paz es la victoria.

La historia parece indicar que en la mayoría de los intentos anteriores ha imperado la desconfianza entre las partes. Para no ir muy lejos en la última realizada en el Caguán y liderada por el ex presidente Pastrana,  todo parece indicar que mientras la guerrilla aprovechaba la tregua para rearmarse, el gobierno firmaba en los Estados Unidos lo que posteriormente se conoció como el Plan Colombia; es decir, las partes realmente no estaban pensando seriamente en la paz. Pero resulta que la guerra nos está saliendo muy costosa no sólo en dinero sino también en vidas, viudas y huérfanos de lado y lado y sobre todo en lo que respecta a la población civil, que al encontrarse en medio de los combates recibe plomo porque sí y porque no.  Es la hora que los colombianos respaldemos la propuesta del presidente y la apoyemos, convencidos que esta vez, la buena fe será el fundamento  de las partes, de lo contrario, será una frustración más en este doloroso proceso en que se  ha  convertido la búsqueda de la paz en nuestro país.